domingo, 7 de octubre de 2007

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Siento a alguien que me llama, si, a mi, un mediodía de domingo donde todos están durmiendo o levantándose para hacer el asadito en familia.
"Quién sos?"- pregunto. Obviamente nadie responde en voz alta pero igualmente siento que me contestan.
Claro, debo ser yo quien se pregunta y se responde.
No creo q nadie tenga la razón absoluta en todo y cuando tenemos una duda y sabemos que es lo que nos haría feliz y que nos pondría contentos en ese momento no queremos escuchar opinión ajena, no queremos que nadie nos diga lo contrario de lo que pensamos. Nos escuchamos a nosotros mismos y vamos contentos o seguros pensando que eso está bien.
Las alegrías o tristezas, la felicidad y la no felicidad claro que dependen nada mas que de nosotros, el truco está en saber que es lo que realmente nos hace feliz o sólo nos pone contentos.

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